Ahora que se habla tanto de fascismo (cualquiera, a la mínima ocasión, es insultado con el epíteto de fascista, cuando se quiere decir simplemente intolerante, por ejemplo) sería conveniente echar la mirada a la Historia y repasar las raíces y las características reales y auténticas del fascismo, como ideología de masas triunfante en el siglo XX en muchos países de Europa, para no confundirlo con ese ‘insulto facilón’ con que algunos esgrimen, precisamente, una actitud en algún sentido fascista.
