De acuerdo con Heródoto, el famoso historiador griego, los egipcios “situaban la limpieza por encima del decoro”. La higiene corporal era una obsesión para los habitantes del país del Nilo, por lo que le dieron una gran atención a este aspecto durante el siglo VI a.C.
Los legados históricos refieren que el cuidado personal era una prioridad, sobre todo en las clases altas. Además, querían estar al tanto de lo último en temas de moda y maquillaje, algo bastante común entre las personas hoy en día. Un ejemplo de ello es que los restos funerarios encontrados tenían a los propietarios enterrados con un gran número de productos cosméticos.