¿Quién fue la primera top model de la Historia?
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El moderno concepto de lo que es una supermodelo o top model señala a mujeres que como Janice Dickinson (quien se autoproclamó como segunda top model, detrás de Gia Marie Carangi, la modelo que falleció víctima del SIDA en la década de los 80), vivieron su momento de esplendor a finales del siglo XX.
La historia de Audrey Munson contada en nuestro canal de Youtube
Pero indagando en la Historia nos encontramos con una mujer que, mucho tiempo atrás, destacó por ser la primera gran modelo en muchos sentidos: desde la fotografía, pasando por sus interpretaciones cinematográficas, hasta ser la copia fiel del rostro en estatuas que aún se erigen conservando su belleza. Se trata de Audrey Munson, cuya historia de final infeliz incitado por la locura vamos a conocer…
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Audrey Munson, la primera top model
Corría el año 1891 cuando Audrey Munson veía la luz en Rochester, Nueva York. Antes de que cumpliera los 10 años sus padres se habían divorciado, la madre conservó la custodia en exclusiva de Audrey y las dificultades económicas para mantenerse.
Su rostro, de belleza inusual en la época donde imperaban otros modelos muy diferentes a los actuales fue descubierto por un fotógrafo que se sorprendió de la joven beldad que, ajena a lo que estaba por llegar, observaba un escaparate de la Quinta Avenida.
Desde muy pequeña Munson soñaba con ser actriz, lo que motivó que madre e hija se mudaran al centro de Nueva York para perseguir su anhelo. Hecho que, como apuntábamos anteriormente, propició su entrada en el mundo artístico de forma casual e inesperada.
Gracias a ese fotógrafo, Audrey consigue su primer trabajo importante: ser modelo para el famoso escultor Isidore Konti.
Sin embargo, ese primer artístico empleo tenía ciertas peculiaridades: Konti quería que Munson posara desnuda para su nueva creación escultórica. Sus intenciones, insistió, eran castas y puras. “Para nosotros, no hay ninguna diferencia si nuestro modelo está desnudo o vestido con pieles“, afirmaba Konti. “Solo vemos el trabajo que estamos haciendo“. Aunque con ciertas reticencias, Audrey aceptó, y su madre también…
Konti quería que Munson posara desnuda para su nueva creación escultórica. Sus intenciones, insistió, eran puras.
Así era el cine de la época de Audrey Munson
A partir de ese primera experiencia, Munson se convirtió en una de las modelos de desnudos más buscadas de Nueva York, inspirando a los más afamados escultores y pintores de la época: Gertrudis Vanderbilt Whitney (más conocida como Miss Whitney), Chester French o Attilio Piccirilli, por citar algunos. Quizá porque en la época tampoco era sencillo encontrar ya no solo una modelo con el canon de belleza exigido sino con la decisión de exhibirlo sin pudor en toda su esencia y extensión.
Fueron numerosas las esculturas que se basan en el rostro de Audrey. Desde la efigie de la Biblioteca Pública de Nueva York, apoyada en un caballo; la que se encuentra en lo más alto de un edificio de la municipalidad de Manhattan, enmarcado con una corona; o en Columbus Circle, en el monumento del USS Maine que podemos ver más abajo en la imagen…
La fama y la gloria
En 1915 fue elegida como modelo para una gran serie de obras destinadas a la Feria Mundial que se celebraba en San Francisco. Es el momento en el que la fama de Munson alcanza a todos los Estados Unidos.
Como no podía ser de otra forma, los productores de Hollywood y Broadway se fijaron en el tirón comercial de Munson para que interpretara sus películas, todavía en ese tiempo mudas, y en las obras de teatro en las que Munson va a actuar en papeles que interpretan en algunos casos una versión de sí misma: una modelo, una musa activa e inspiradora.
La fama de Audrey Munson quizá se debiera a que en esa época tampoco era sencillo encontrar ya no solo una modelo con el canon de belleza exigido sino con la decisión de exhibirlo sin pudor en toda su esencia y extensión
¿Cuáles fueron las películas más destacadas de Audrey Munson?
Los títulos más destacados fueron Inspiration, película de 1915, Purity, realizada un año después y The Girl O’Dreams, de 1918. Estas películas, suscitaron cierta controversia por sus escenas de desnudos, incluso algunos teatros las llegaron a prohibir.
También hizo referencia a la brecha salarial entre mujeres y hombres y al sexismo inherente del mundo del arte
En 1921, Audrey escribe una serie de 20 artículos sobre su vida y su trabajo para la entonces popular revista The New York American, una publicación del magnate de la prensa William Randolph Hearst. En sus artículos, Munson enfatizaba “la naturaleza colaborativa del proceso artístico” y el “importante papel del modelo“. En sus escritos también hizo referencia a la brecha salarial existente entre mujeres y hombres, sobre todo entre actrices y modelos y aludía al sexismo inherente y reinante del mundo del arte de aquellos primeros años del siglo XX.
El triste ocaso de la estrella que deja de rutilar
Poco tiempo después de que Munson escribiera estos artículos, intentó suicidarse. En ese momento ya no es solicitada como modelo y las ofertas para el cine se comenzaban a espaciar demasiado en el tiempo.
Además, dos hechos aparecen en la biografía de Audrey que parecen hablar del incómodo inicio del fatal destino que le esperaba. El primero sucedió en el año 1919, cuando uno de los agentes que contrataba a Munson asesinó a su esposa porque, según él, quería a Audrey y su mujer era un obstáculo en su relación. Munson negó cualquier tipo de relación romántica y fue absuelta por su supuesta participación, pero los medios de comunicación se aferraron a elucubrar historias paralelas de celos y amantes.
El otro incidente tuvo lugar en 1922. Según el relato de Munson, un poderoso productor de Broadway (a quien nunca nombró) entró en su camerino durante la producción de una obra llamada The Fashion Show. Intentó acosarla, pero su reacción fue determinante, según sus propias palabras, le dijo: “No me toques. Te odio. Preferiría tener una serpiente arrastrándose sobre mí que sentir tu mano“. Se dice que este acontecimiento, además de acabar con la intervención de Munson en la obra, produjo que comenzara a tener problemas para encontrar trabajo.
Sin empleo durante mucho tiempo, Munson se trasladó al norte de Nueva York y comenzó a trabajar como camarera. Fue entonces cuando empezó a mostrar signos de enfermedad mental, como su insistencia en ser conocida como “Baronesa Audrey Meri Munson”.
Ella culpó de su caída al “pueblo judío”, y su abierto antisemitismo la llevó a contactar a la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, insistiendo en que se creara una ley que la protegiera de “los hebreos“. Quizá aquel empresario que intentó abusar de ella fuese judío. ¿Quién sabe? Solo Audrey podría explicarlo, pero esa cuestión no ha quedado registrada.
Con cuarenta años de edad, Munson fue ingresada en un sanatorio mental, cerca de la frontera con Canadá, en el hospital estatal St. Lawrence, donde fallecería, mucho tiempo después, a la edad de 104 años, quizá sin recordar que su rostro de neoclásica belleza sigue -y seguirá mirando- impertérrito a los ojos de las gentes que desconocen su Historia.
Para saber más:
“American Venus: The Extraordinary Life of Audrey Munson, Model and Muse“.Diane Rozas (1999)
“The Curse of Beauty: The Scandalous & Tragic Life of Audrey Munson, America’s First Supermodel”. James Bone (2017)
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Bella y atrevida. Lástima su final triste. Me ha encantado conocer la historia de esta mujer de la que no había oido hablar nunca. Un saludo desde Madrid!
Impresionante la historia de esta mujer. Cómo cambian los cánones de belleza de un tiempo a otro…
Seguro que esta mujer era un bellezón para la época
interesante historia… y pensar que es la imagen de tantas esculturas.
Es cierto, la percepción de las bellezas cambian en función de las épocas. Es pura evolución, como en casi todo. No conocía a esta peculiar mujer, sin duda adelantada a su tiempo.
Bella mujer en su época aunque otro juguete roto de la sociedad d consumo
Una historia poco conocida, por eso me gustan tanto sus contenidos. Gracias!!
Guau qi historia. Hay película?
Esta historia bien merecería una película. Qué biografia
Era realmente bella. Que grande esa primera TOP MODEL. Me gustan vuestros artículos, son muy interesantes y son cosas que no nos cuentan. Estamos tan rodeados de cosas banales…