Hoy en día, la página web es la carta de presentación de toda empresa. Hace muchos años atrás, los directorios telefónicos nos proporcionaban la información de una compañía que buscábamos. El internet nos ha permitido almacenar toda esa data a solo unos clics y revisarla en cualquier momento.
No obstante, muchos empresarios aún no reconocen la importancia de tener una adecuada página web y han descuidado esta herramienta de comunicación. Tener información desactualizada, un sistema de navegación confusa y los datos no muy claros contribuyen a generar un clima de desconfianza en el usuario, quien puede optar por abandonar el sitio.
Esto puede resultar peligroso, pues Google valora los sitios webs de acuerdo con su contenido. Si observa que no es amigable y la experiencia de usuario es deficiente, la calificación será baja. Recuperar esto no es tarea sencilla. Por tanto, debemos revisar correctamente los siguientes puntos y asegurarnos de que estamos haciendo bien las cosas.
- Tener un dominio propio. Nos permite tener un nombre personalizado que guarde relación con el negocio. Además, es fácil de promocionar, pues hay menos información para memorizar y la URL es más amigable.
- Tener un hosting adecuado. El hosting debe proporcionar rapidez para abrir páginas y seguridad. Además, se aconseja el uso de una dirección IP (número que nos identifica) que sea dedicada, a fin de que los problemas de otros sitios web no perjudiquen el de nuestra empresa. La compartida es más usada por compañías que recién inician.
- Disponer de un certificado digital SSL. Se trata de un estándar de seguridad global que permite que la transferencia de datos se realicen de forma segura. El cifrado de información contribuye a que ambas partes tengan una “conversación” privada, lo cual resulta esencial para evitar interceptaciones.
- Incluir notas legales y Aviso de cookies. Los datos de Copyright representan un signo de seguridad y confiabilidad para los visitantes. Además, el Aviso de cookies comunica al usuario la intención de realizar un uso con su autorización a fin de recibir publicidad basada en sus intereses.
- Mostrar información actualizada de la empresa. La página web debe permitir al usuario tener acceso a datos confiables y veraces de la compañía, lo cual le transmitirá la confianza de realizar alguna compra o seguir navegando en ella. Caso contrario, podría interpretar que la empresa está paralizada o ha sufrido algún tipo de cambio.
- Proporcionar información sobre los fundadores y ejecutivos. La página web debe mostrar quiénes forman parte de la estructura más alta de la compañía, así como quienes son los fundadores y una breve historia de la formación. De este modo, habrá confianza al conocer qué personas constituyen la empresa cuyos productos nos interesa.
- Incluir botones de acceso a redes sociales. Es necesario vincular las redes sociales con el sitio web de la compañía, a fin de fortalecer los canales de comunicación con los clientes.
¿Qué te ha parecido?
